Boletín epidemiológico
Baja vacunación y brotes: coqueluche, psitacosis y legionelosis en alza
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El informe oficial del Ministerio de Salud revela incrementos inéditos en patologías como la coqueluche, la psitacosis y la legionelosis. Cómo impacta la baja vacunación y qué advierten los especialistas.
Luciana Lanzamidad
En un escenario donde la vigilancia sanitaria vuelve a estar en el centro de la escena, el último Boletín Epidemiológico Nacional (BEN) muestra un aumento significativo en varias enfermedades transmisibles y eventos de salud pública.
Los datos corresponden a la Semana Epidemiológica 46 del año 2025 y comparan el comportamiento de cada evento con la mediana del período 2020-2024. El crecimiento de algunas patologías es tan marcado que obliga a reforzar la prevención, la vacunación y la detección temprana.
Coqueluche: el aumento más contundente del año
La tos convulsa encabeza la lista de enfermedades con subas fuertes. Según el boletín, entre las SE1 y SE46 de 2025 se notificaron 4.825 casos sospechosos, de los cuales 627 fueron confirmados. La comparación con los años previos es elocuente: los casos confirmados aumentaron un 258% respecto de la mediana del período 2020-2024
Este incremento se da en un contexto de caída sostenida de las coberturas de vacunación, profundizada durante la pandemia. El informe explica que, a nivel global, la coqueluche había alcanzado mínimos históricos en 2021, pero desde 2022 los casos crecieron de manera marcada tanto en el mundo como en la región.
La OPS ya alertó a los países por esta tendencia y recomendó fortalecer la vigilancia y aumentar las coberturas, especialmente en niñas y niños menores de un año
En Argentina, los especialistas remarcan que la vacunación de personas gestantes es clave para proteger a los lactantes, el grupo más vulnerable. Desde 2013, la triple bacteriana acelular (dTpa) después de la semana 20 se aplica en cada embarazo, independientemente de las dosis previas. Mantener esta estrategia es fundamental para reducir hospitalizaciones y muertes
Psitacosis y legionelosis
Otra enfermedad que muestra una variación muy marcada es la psitacosis, una zoonosis transmitida por aves. El BEN señala un aumento del 147% en las notificaciones totales y del 165% en los casos confirmados respecto de la mediana histórica. Este salto convierte al evento en uno de los de mayor crecimiento en 2025
La enfermedad suele diagnosticarse menos de lo que ocurre, porque los casos leves pueden confundirse con cuadros respiratorios comunes.
El informe explica que la exposición a aves —domésticas o silvestres— es el principal factor de riesgo, y remarca la importancia de detectar a tiempo cualquier antecedente de contacto con loros, cotorras, guacamayos, palomas o aves de corral. También recuerda que, aunque es poco frecuente, se han documentado infecciones persona a persona
La legionelosis, una infección respiratoria causada por la bacteria Legionella, muestra un aumento aún más llamativo: pasó de una mediana de 2 casos a 18, lo que representa un incremento del 800%
Aunque el número absoluto es bajo, la variación obliga a reforzar la vigilancia de fuentes ambientales como sistemas de agua, torres de enfriamiento y ambientes donde la bacteria puede proliferar.
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Intoxicaciones y accidentes
El boletín también describe cambios importantes en eventos vinculados a intoxicaciones. Las exposiciones a plaguicidas agrícolas crecieron un 400%, mientras que las intoxicaciones por plaguicidas de uso doméstico aumentaron un 380% respecto de la mediana histórica. Las intoxicaciones por hidrocarburos, por su parte, subieron un 86%
A esto se suma el crecimiento de los accidentes potencialmente rábicos, con un aumento del 96% en relación con el período 2020-2024. También se registró un incremento del 66% en los casos de alacranismo y del 64% en mordeduras de serpientes del género Bothrops (yarará)
Estos datos muestran que, además de las enfermedades transmisibles, los eventos vinculados al ambiente, los animales y el uso de sustancias peligrosas pueden tener variaciones significativas asociadas a cambios en hábitos, clima o condiciones socioeconómicas.
Enfermedades epidémicas: señales para vigilar
Entre las patologías transmisibles, también crecieron:
Leptospirosis, con un aumento del 283% en los casos confirmados
Hepatitis A, con un incremento del 279% respecto de la mediana histórica.
Tuberculosis, con una suba del 28% en comparación con los años previos
La sífilis en población general muestra una tendencia sostenida al alza: en 2025 se notificaron más de 48 mil casos, un 69% más que la mediana 2020-2024, consolidándose como uno de los eventos de transmisión sexual más relevantes del país
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Por qué crecen estas enfermedades
El boletín menciona varios factores que pueden explicar estos incrementos:
Caída de las coberturas de vacunación en la pandemia, con una recuperación lenta;
Exposición creciente a fuentes ambientales y zoonóticas;
Mejora en la vigilancia y en la identificación de casos;
Mayor circulación de agentes patógenos en un contexto de movilidad plena;
Desigualdades subnacionales en el acceso a la salud y al diagnóstico.
Los equipos de epidemiología nacionales y provinciales siguen estas tendencias de cerca para orientar estrategias de prevención, controlar brotes e identificar poblaciones en riesgo.
