Dolor en el fútbol
Conmovedor minuto de silencio por Diogo Jota en el Mundial de Clubes

Antes del partido entre Al-Hilal y Fluminense, se homenajeó al delantero portugués fallecido en un accidente. Joao Cancelo y Rubén Neves no pudieron contener las lágrimas.
El Mundial de Clubes vivió un momento de profunda emoción antes del duelo entre Al-Hilal y Fluminense, por los cuartos de final. Fue el primer minuto de silencio de la competencia y estuvo dedicado a Diogo Jota y su hermano André Silva, fallecidos en un accidente de tránsito en España.
La FIFA confirmó la decisión en las horas previas al inicio de los partidos: todos los encuentros de cuartos de final tendrían un homenaje oficial, con minuto de silencio en memoria del delantero del Liverpool y su hermano menor.
Compañeros conmovidos
En el césped del estadio, las cámaras enfocaron el rostro compungido de Joao Cancelo y Rubén Neves, ambos compañeros de Jota en la selección de Portugal. Acababan de consagrarse junto a él como campeones de la UEFA Nations League. La noticia los golpeó de lleno.
Cancelo, con los ojos vidriosos y la cabeza gacha, apenas pudo mantenerse en pie. A su lado, Neves permaneció inmóvil, con los brazos cruzados y el rostro endurecido por el dolor. No hizo falta una palabra: la imagen hablaba por sí sola.

Una tragedia inesperada
Diogo Jota tenía 28 años y jugaba en el Liverpool de Inglaterra. Su hermano André Silva tenía 26. Ambos fallecieron en un accidente automovilístico ocurrido en la madrugada del jueves 3 de julio, en la autopista A52, a la altura de Zamora, en el noroeste español.
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Según informaron medios internacionales, los hermanos viajaban en un Lamborghini que se salió de la ruta, posiblemente tras reventar un neumático mientras intentaban un adelantamiento. El vehículo se incendió y los bomberos de la zona no pudieron rescatarlos a tiempo.

El fútbol europeo amaneció en silencio. Las redes sociales de clubes, jugadores y federaciones replicaron mensajes de dolor y despedida. En Liverpool, Anfield fue abierto para que los hinchas dejen flores y bufandas.
La FIFA decidió rendir homenaje inmediato. No sólo en redes: en la cancha. Con la pelota quieta. Y el corazón estrujado.