De esto sí se habla
Ludopatía juvenil: apuestas móviles, autonomía y consecuencias emocionales
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El psiquiatra, Lucas Raspall, brindó una charla en el Paraninfo de la UNL en el marco del cierre del programa “De esto sí se habla”, impulsado por el Concejo Municipal junto a instituciones locales. Alertó sobre los mecanismos que utilizan las plataformas de apuestas online para captar a los adolescentes.
Luciana Lanzamidad
La adicción al juego irrumpe en los hogares y alcanza a niños y adolescentes a través de un dispositivo tan común como el celular. Este fue uno de los ejes que planteó el médico psiquiatra y psicoterapeuta Lucas Raspall, quien brindó una charla titulada “Apostar nunca es un juego. Apuestas online y ludopatía”, en el marco del cierre del programa “De esto sí se habla”, organizado por el Concejo Municipal de Santa Fe junto a diversas instituciones.
Reflexionar sobre los nuevos riesgos
El encuentro se desarrolló este lunes por la mañana en el Paraninfo de la Universidad Nacional del Litoral (Bv. Pellegrini 2750), con entrada libre y gratuita. La actividad formó parte de una propuesta que, durante tres meses, buscó poner en agenda la salud mental adolescente y, en particular, los riesgos asociados a la ludopatía digital y las apuestas online.

Además de la conferencia central de Raspall, la jornada incluyó la proyección de cortos audiovisuales producidos por estudiantes de cinco escuelas de la ciudad, quienes trabajaron en talleres y actividades para visibilizar el fenómeno desde su propia mirada.
El programa “De esto sí se habla” fue acompañado por el Gobierno de la Provincia de Santa Fe, la Lotería de Santa Fe, la Municipalidad, la UNL, la Fundación Cinemas y profesionales de la salud y la comunicación. Participaron el Instituto Leonardo Da Vinci, la Escuela Técnica Dr. Pedro Lucas Funes, el Colegio Sagrado Corazón de Jesús, la Escuela Normal Superior y el Colegio Arquidiocesano San José.

La voz de las autoridades
El vicepresidente ejecutivo de la Lotería de Santa Fe, Daniel Di Lena, subrayó el compromiso del organismo con esta problemática.
“El tema de la ludopatía es un problema que nos aqueja desde hace bastante tiempo y que desde el Gobierno de la provincia de Santa Fe lo tomamos desde el primer día. No miramos para un costado. Estamos convencidos de la necesidad de seguir haciendo más acciones que concienticen a los jóvenes y, por supuesto, pedirles a los propios padres que estén mucho más atentos. Hay que tener algo claro: las apuestas no son un juego, son mucho más que eso, y tenemos que estar todos muy atentos para poder colaborar, sobre todo con los menores”, señaló.
En relación con la fuerte campaña de afiches desplegada en la ciudad, Di Lena fue consultado sobre su impacto y el nivel de llegada a los adolescentes.
“Esperemos que sí. Tenemos algunos comentarios que nos ponen muy contentos porque, sin lugar a dudas, fueron buenas las críticas a la campaña. Desde luego, en una campaña siempre se puede hacer más o menos, pero es muy difícil hablarles a los jóvenes, más aún a los menores".
"Nosotros intentamos comenzar por esto, que no es lo único. Vamos a ampliar en los próximos meses con más acciones, con campañas en las que también vamos a involucrar a algunos deportistas. Hoy vimos estos cortos que se publicitaron acá, que los hicieron los propios chicos. Sinceramente vamos a ver de poder hacerlos públicos y masificarlos, porque son uno de los mejores recursos que podemos darles”, concluyó.
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“Apostar no es un juego”
Durante su disertación, Lucas Raspall explicó de manera clara cómo funcionan los mecanismos que vuelven adictivos a muchos juegos en línea. Se detuvo en lo que denominó “recompensa variable intermitente”, un sistema que funciona de manera similar a una máquina tragamonedas y que genera expectativas constantes en el jugador.
“Ese mecanismo —dijo— hace que nuestro cerebro quede atrapado. Por eso cualquier juego que opere así tiene el potencial de generar adicción. Y las apuestas online se basan en esto”.
El especialista también advirtió que en Argentina el 65% de los niños de 9 años ya tiene un celular propio, lo que los expone tempranamente a un campo de autonomía digital sin supervisión adulta. “A los 9 años un chico puede cliquear un enlace, escanear un QR o entrar a una página de apuestas online. Esto pasa todos los días”, señaló.
Según relató, muchas plataformas ofrecen bonos iniciales de hasta 200 mil pesos, lo que genera la sensación de que “no hay nada para perder”. Sin embargo, el algoritmo está diseñado para que el jugador gane al principio y luego empiece a perder, lo que puede derivar en deudas crecientes y en un círculo de ocultamiento, ansiedad y deterioro de la salud mental.

Un problema que afecta la salud mental
Raspall subrayó que la ludopatía digital no comienza como una adicción. “A veces alcanza con una sola noche de apuestas para generar un gran problema. Nadie empieza apostando con la idea de arruinarse la vida, pero las estadísticas muestran que muchos adolescentes terminan atrapados”, expresó.
El psiquiatra advirtió que este fenómeno se da en un contexto que llamó la “tormenta perfecta”:
La mayoría de los adolescentes tiene celular y conectividad,
El auge de las plataformas digitales tras la pandemia,
La presencia de publicidades de casas de apuestas en clubes deportivos y partidos televisados,
El acceso a billeteras virtuales que facilitan las transacciones.

“Todo esto naturaliza las apuestas online como un simple juego, pero no lo son. Para que las plataformas ganen, ustedes tienen que perder. No hay otra forma”, afirmó.
El especialista también hizo hincapié en el impacto emocional: ansiedad, irritabilidad, insomnio, mentiras, problemas en los vínculos y hasta riesgo de suicidio en casos graves. Recordó que recientemente, en Santa Fe, un adolescente se quitó la vida con deudas de apuestas como uno de los factores desencadenantes.
La prevención como tarea compartida
Raspall destacó que la clave está en la prevención y en el acompañamiento entre pares. “Está muy bien que lo trabajen las escuelas, los clubes, las familias y las instituciones. Pero al final, el sábado a la noche, en el recreo o en una juntada, la persona más importante que puede prevenir es el propio amigo o amiga que diga: ‘Eso no está bueno, no va a terminar bien’”, remarcó.
Finalmente, insistió en que hablar de ludopatía en el marco de la salud mental adolescente es urgente. “Apostar no es un juego. Puede haber diversión y entretenimiento en las pantallas, pero cuando se trata de apuestas online, casi siempre termina en problemas. Escuchar a los jóvenes y darles herramientas para que se cuiden entre ellos es fundamental”, concluyó.