¿Se reactiva?
Nuevos reclamos por la vuelta del tren Rosario-Cañada de Gómez

Intendentes, gremios y usuarios presionan para que se reactive el servicio ferroviario suspendido desde diciembre. Apuntan a recuperar formaciones en desuso y sumar paradas intermedias.
El servicio de tren de pasajeros que une Rosario con Cañada de Gómez volvió a estar en el centro del debate. Tras la interrupción de los viajes desde diciembre de 2023, distintos sectores insisten en su reactivación para garantizar una opción de movilidad económica, segura y eficiente para miles de santafesinos.
El pedido se formalizó esta semana a través de una nota elevada a autoridades del Ministerio de Transporte de la Nación, con el respaldo de intendentes, gremios, organizaciones de usuarios y legisladores de distintos espacios políticos. El objetivo es lograr que el servicio se restablezca en el corto plazo con una frecuencia adecuada y condiciones dignas para los pasajeros.
Una de las principales demandas gira en torno a la falta de formaciones ferroviarias. En ese sentido, se planteó la posibilidad de trasladar coches que actualmente están en desuso en Buenos Aires para destinarlos al corredor Rosario–Cañada. Según los impulsores de la propuesta, con ese recurso sería factible reactivar el servicio con al menos dos frecuencias diarias.
“Contar con trenes de cercanía no es solo una cuestión de nostalgia o de historia. Es una necesidad concreta para estudiantes, trabajadores y personas mayores que necesitan una opción de transporte accesible”, señalaron desde una de las agrupaciones que promovió la nota presentada.
En base a los datos oficiales a los que accedió Mirador Provincial, el trayecto completo entre Rosario y Cañada de Gómez tiene una duración estimada de una hora y media, y había alcanzado una ocupación promedio del 80% durante los meses en los que funcionó en 2022 y parte de 2023.
El servicio había sido presentado como un avance en materia de transporte regional, con paradas intermedias en localidades como Funes, Roldán, San Jerónimo y Carcarañá. Justamente, los intendentes de esas localidades también manifestaron su interés en que el tren vuelva a circular, por el impacto que tiene en la conectividad local.
Además del traslado de unidades desde Buenos Aires, se propuso trabajar en una coordinación más estrecha con gobiernos locales para garantizar condiciones óptimas en las estaciones y avanzar en tareas de mantenimiento del tendido ferroviario.
El sindicato La Fraternidad también manifestó su respaldo a la reactivación, y recordó que el personal de conducción y mantenimiento está disponible y capacitado para retomar las tareas apenas se autorice el regreso del servicio.
El pedido fue acompañado por diversos sectores políticos, que coincidieron en que la reactivación del tren debe ser una política de Estado. Legisladores de diferentes bloques insistieron en que es necesario priorizar la inversión en transporte público federal, descentralizado y accesible.
Mientras tanto, vecinos y vecinas de las localidades involucradas volvieron a manifestarse a través de redes sociales, expresando su deseo de que el tren vuelva a ser parte de su rutina cotidiana, no solo por su valor económico, sino también por el impacto ambiental positivo frente al uso masivo de vehículos particulares.