El proyecto se entregó este miércoles
Universidades intentarán con nuevo proyecto una ley para su financiamiento

La propuesta ahora deberá ser debatida en la Comisión de Educación de Diputados del Congreso. Hubo concentraciones nacionales y locales para acompañar la presentación.
Mariela Goy
Las universidades vuelven al ruedo en un nuevo intento por garantizar su presupuesto. Este miércoles la comunidad universitaria y científica del país presentó en el Congreso de la Nación un proyecto de Ley de Financiamiento para la Educación Universitaria. La iniciativa fue acompañada de una concentración en Buenos Aires. También en la explanada del Rectorado de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) se congregaron autoridades, gremios y estudiantes que destacaron la urgencia de recursos estables y suficientes para la educación superior.
El proyecto de ley fue elaborado de forma conjunta por el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), el Frente Sindical de Universidades Nacionales (que reúne a los gremios) y la Federación Universitaria Argentina (FUA), con el aporte de todos los sectores universitarios. El objetivo central es garantizar un financiamiento previsible, progresivo y protegido legalmente para las universidades públicas, en un contexto de fuerte ajuste presupuestario y pérdida de poder adquisitivo.
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"Desde la UNL estamos acompañando el acto que se está haciendo en la Plaza de los dos Congresos, donde se está entregando este proyecto de ley a la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados", señaló el rector de la UNL, Enrique Mammarella, durante la convocatoria local.
Los participantes de la concentración en Santa Fe hacían flamear banderas argentinas y recibían el apoyo con bocinazos de los conductores que pasaban por bulevar Pellegrini 2750. Hubo conferencia de prensa, pero no acto. Sólo una foto final de los manifestantes encolumnados detrás del estandarte que decía "Universidad pública y gratuita. Por una Ley de Financiamiento Universitario".

Puntos básicos
La nueva propuesta llega tras el veto presidencial, en 2024, de una ley similar aprobada por el Congreso. Aquella norma había sido impulsada luego de masivas movilizaciones en defensa de la universidad pública. "Es volver a tratar de que, como el año pasado conseguimos una ley que luego fue vetada, este año empezamos a trabajar antes, con un nuevo proyecto que contemple la posibilidad de que el Congreso no solo lo vuelvar a aprobar, sino que lo pueda sostener", expresó Mammarella.
El proyecto se basa en tres ejes principales: recomposición, adecuación y previsibilidad. "El proyecto tiene una parte de recomposición, otra de adecuación del presupuesto con miras a 2026 y, fundamentalmente, una ley de financiamiento para que de aquí en adelante se destinen de forma automática fondos a la educación superior", explicó Mammarella.
El texto establece una senda de aumento gradual del presupuesto universitario hasta alcanzar el 1,5% del PBI en 2031-actualmente ronda el 0,5%-. Además, busca garantizar cada año el piso de recursos básicos para el funcionamiento de las universidades, crear un fondo de $ 10.000 millones para carreras estratégicas, y ampliar progresivamente el financiamiento de becas estudiantiles.
También contempla una recomposición del poder adquisitivo de los trabajadores universitarios tomando como base la inflación acumulada desde diciembre de 2023.

"Hoy estamos con presupuestos pasados, reconducidos, para pensar la universidad del futuro -alertó el rector-. Esto genera demasiados problemas. Por un lado lo salarial, por otro lado la posibilidad de que los estudiantes sigan dentro de las aulas universitarias debido a que no se cuentan con las becas en cantidad suficiente y en dinero suficiente, y fundamentalmente también el funcionamiento universitario tiene que ver con obras de infraestructura, con equipamiento".
Y añadió: "Hoy nuestro país, por ejemplo, está en un grave ataque de ciberseguridad. Y todo esto significa recursos, dinero. No es solamente dar clases: es proteger los datos, trabajar en nueva infraestructura, en tecnología.
"Situación extrema"
En Santa Fe, la comunidad universitaria unió su apoyo. Desde Apul (del personal no docente de la UNL), Guillermo Russo expresó que "estamos en una situación extrema. Como trabajadores nucleados en la única federación, Fatun, acompañamos esta iniciativa porque trabajamos todos los días con la comunidad universitaria para lograr la aprobación de esta ley".
A su lado, Lucio Eizenach, miembro del gremio Apul y consejero directivo de la UNL, explicó que "el posicionamiento nuestro es claro. Vamos a insistir con una ley en puntos que nos parecen clave para el sistema universitario y que va más allá del tema salarial, sino también con las becas, la extensión en territorio, la ciencia, la tecnología en vinculación con el sector privado. En todas esas tareas hay un personal docente pero también un personal no docente que acompaña".
Asimismo, indicó que "la pérdida salarial del personal universitario es terrible: llevamos más del 60% acumulado en este año y medio, con lo cual una ley que nos proteja es sumamente necesaria".
En tanto, Roberto Longo, presidente de la Federación Universitaria del Litoral (FUL), aseguró: "Acompañamos en consenso entre todos los representantes estudiantiles, entendiendo que los principales afectados por la falta de financiamiento somos los estudiantes".