Villa Cañás cerró el acceso a los espacios públicos en busca de frenar los contagios
El Comité de Crisis de Villa Cañás emitió este domingo un comunicado expresando que “en función de la crítica situación sanitaria que estamos atravesando en la ciudad y con el objetivo de intentar disminuir la curva de contagios de Covid-19, evitar que colapse la atención hospitalaria y que se pueda dar respuesta desde los efectores de salud, el Comité de Crisis local resolvió durante una reunión cerrar los diferentes espacios públicos de la localidad y de esa manera impedir que se generen aglomeraciones”.
Además, el informe señala que “efectivos de la Comisaría 6° y personal de la Guardia Urbana realizarán controles exigiendo el uso obligatorio de barbijo o tapaboca a toda persona que circule en la vía pública”.
Por otra parte, en el transcurso de la semana entrante se definirá e implementará “un conjunto de medidas preventivas” para intentar disminuir la circulación del virus.
También se recuerda que continúan “suspendidas” las reuniones sociales en domicilios particulares.
“El compromiso y la responsabilidad social e individual sigue siendo el camino para poder transitar esta pandemia. Nos cuidamos entre todos”, completa el texto oficial.
Mano dura que se veía venir
Norberto Gizzi, intendente de Villa Cañás.
Esta decisión de las autoridades municipales cañaseñas se inscribe en un contexto epidemiológico apremiante, con sostenido ascenso de casos positivos desde principio de abril hasta la fecha.
En este marco, la ciudad acompañó el decreto provincial que una semana atrás suspendió actividades en clubes, gimnasios y otros establecimientos afines, como así también la realización de todo tipo de eventos religiosos en lugares cerrados hasta el 21 del corriente. Ya en ese entonces el intendente Norberto Gizzi había exhibido signos de preocupación ante la “irresponsabilidad comunitaria” en las reuniones sociales en casas de familia o en los espacios públicos. Y advirtió que ese fin de semana (sábado 8 y domingo 9) “había mucha gente sin barbijo ni con los recaudos ya conocidos, y cuando van los inspectores a llamarles la atención no les hacen caso”, en tanto que enseguida lanzó la advertencia: “Somos todos hijos del rigor y si no hay acatamiento vamos a tener que trabajar conjuntamente con la Policía y tomar medidas o poner nuevamente las fajas de clausura en las plazas”, como sucedió este domingo para evitar la continuidad del descontrol.
