Infancia y Salud
Dengue, una preocupación global
"El dengue nos preocupa ahora más que antes, entre otros motivos, porque la vacunación anti-dengue no está siendo precisamente un éxito", alerta el autor de la columna.
Por Jorge Bello
Todos sabemos que un primer episodio de dengue suele ser como una gripe fuerte, y que el segundo episodio puede ser dengue grave y necesitar atención urgente en el hospital. Ahora veamos el caso de una embarazada y de su bebé. Supongamos que una mujer se enferma de un primer episodio de dengue durante el embarazo. Lo más probable es que presente un cuadro clínico de fiebre y malestar durante varios días.
Por tener y luego haber tenido la infección dengue, la embarazada tendrá defensas (anticuerpos) contra el dengue, que la protegen de la re-infección. Estas defensas le durarán unos años, tal vez muchos, no se sabe cuántos. Y estas defensas le pasan al bebé en gestación a través de la placenta. Nacido el bebé, las defensas que le pasara su madre lo protegen contra el mismo dengue, pero esta protección sólo dura unos meses, no se sabe cuántos, tal vez seis u ocho.
Estas defensas de la madre son efectivas para el bebé, pero poco a poco van bajando y pasados unos meses el bebé se queda con un nivel demasiado bajo de estas defensas. Y, por lo tanto, puede enfermar de dengue. Si enferma de dengue, esta vez la enfermedad se comporta como un segundo episodio, y esto implica en consecuencia la posibilidad, para el bebé, de tener un dengue grave.
Esta es otra de las razones por las cuales la vacuna contra el dengue es sin duda recomendable, pero en ningún caso para la mujer embarazada, ni durante la lactancia. Para proteger a la embarazada, y a todos en general, hay que insistir con las medidas que son bien conocidas: eliminar los restos de agua para evitar que el mosquito se reproduzca, usar mosquitera y repelente, etc.
La vacuna anti-dengue que se aplica en Argentina, de nombre Qdenga, es segura y efectiva. Pero no es para embarazadas ni para las mujeres que estén dando el pecho. Y es responsabilidad de las autoridades, de la Nación y de la Provincia, incluso de la Municipalidad, hacer todo lo que haga falta para que la vacuna llegue a la población. Como todas las vacunas, ésta también tiene que ser gratis, tal como son las demás vacunas que se administran en el país.
Recordemos que las vacunas son, por definición legal, un bien social y gratuito (ley nacional N° 27491) y que la dicha ley garantiza, o debería garantizar, el acceso de todos a las vacunas. Si la autoridad le pide a la población que haga ciertas tareas de prevención, ciertos esfuerzos y sacrificios, entonces la misma autoridad debe hacer las tareas que le competen y los esfuerzos que le corresponden.
El dengue nos preocupa ahora más que antes, entre otros motivos porque la vacunación anti-dengue no está siendo precisamente un éxito, y porque los muchos turistas que regresan y regresarán de Brasil pueden traer el dengue en la sangre (sabiéndolo o sin saberlo) y contribuir por tanto al contagio de otras muchas personas.
Ahora sigamos con las defensas. Las defensas de aquella embarazada, y de todos los que hayan tenido un primer episodio de dengue, son defensas que duran unos años, y son efectivas para prevenir el dengue, pero sólo para prevenir el mismo dengue, el que provoca el mismo tipo de virus dengue. Recordemos que hay cuatro serotipos de virus dengue, llamados 1, 2, 3 y 4.
Por ejemplo: quien tuvo un primer episodio de dengue provocado por el virus dengue 1, lo más probable es que no vuelva a tener dengue causado por el mismo tipo de virus dengue. Pero sí que puede tener un segundo episodio de dengue causado esta vez por otro de los tipos de virus dengue. Este segundo episodio de dengue puede ser grave. En cambio, los terceros o cuartos episodios de dengue no suelen ser tan graves, aunque tampoco son ligeros. Téngase presente que siempre está la posibilidad de excepciones, y que éstas no son del todo fáciles de explicar. Y que no todo cuadro febril, con dolores, malestar, etc., es un caso de dengue.
La vacuna anti-dengue Qdenga ofrece protección contra los cuatro serotipos del virus dengue, pero hay razones para pensar que la protección no sería igual en los cuatro serotipos sino en alguno más que en los otros. Esta es la vacuna que se aplica en Argentina, y requiere dos dosis separadas por al menos tres meses. Es segura y efectiva, y vale la pena. La aplicación de la segunda dosis es un requisito indispensable para obtener buena protección contra el dengue. Hay que velar, por tanto, para que quien recibió la primera dosis, reciba por favor la segunda.
Problema global
El dengue es una preocupación global. Lo demuestra, por ejemplo, el hecho de que los estudios sobre cómo prevenir el dengue mediante una nueva vacuna han sido elegidos como una de las investigaciones científicas más notables del 2024.
La prestigiosa revista médica NEJM -The New England Journal of Medicine- publicaba el mes pasado la selección de las investigaciones científicas más notables del año pasado, y en primer término están los estudios sobre la vacuna Butantán-DV, es decir, la vacuna anti-dengue que se está desarrollando en Brasil, donde la situación por dengue es peor que en Argentina. Las investigaciones están avanzadas y los resultados son prometedores.
Administraron la vacuna, en dosis única, a un conjunto de diez mil personas cuyas edades van de los 2 años hasta los 59. En 16 lugares de cinco regiones de Brasil. Dos años después valoran los resultados. La vacuna les resulta efectiva para prevenir las formas de dengue que presentan síntomas relevantes y en particular para prevenir las formas que requieren la hospitalización del paciente. La efectividad no resultó igual para todos. En los niños de 2 a 6 años fue del 80%. Fue del 90% entre los de 18 a 59 años. Y entre 7 y 17 años, la efectividad fue del 78%. Entre los diez mil vacunados hubo 270 casos de dengue confirmado mediante análisis de sangre, pero ninguno fue una forma grave de la enfermedad ni necesitó quedar internado.
Los investigadores tienen previsto continuar la valoración de los resultados de cada uno de los diez mil vacunados hasta al menos cinco años después de haberlos vacunado. Esta vacuna no es un invento brasilero, sino que el país la desarrolla a partir de una sofisticada tecnología cuya licencia les fue concedida junto a otros países como India, Tailandia y Vietnam, donde recibe otros nombres.
Al igual que la vacuna anti-dengue Qdenga, la vacuna Butantán-DV ofrece protección contra los cuatro tipos del virus dengue (aunque al parecer de manera desigual), pero sólo requiere una sola dosis para ser efectiva. Ambas vacunas son de una eficacia equivalente.